lunes, 22 de octubre de 2012

41 cosas que me hartaron de vos


1. Tu estilo progre: tu película francoiraníhondureña, tus poemas haiku, tu intención de voto latinoamericanista, tu amigo sin dientes y tu compromiso con las personas en situación de.
2. Tu modo galán: ni Lucía, ni Roberto ni el hermano de Lucía.
3. Tu acumulación de figuritas/minitas en el Facebook y de frases elocuentes en el Twitter.
4. Tu: aparezco/desaparezco; aparezco/desaparezco; aparezco/aparezco (ahhhhhhhhhhhhh: te engañé tontona, ahora desaparezco de nuevo por creerme).
5. Tú.
6. Tu mirada relajada sobre todo (vivís pendiente del mundo: boludo).
7. Todo lo que comés.
8. Tu modo de decir: “la gente”, “la sociedad”, “el país”.
9. Tu “yo no miro tele”.
10. Tu estilo facho (sí, lo sé, se contradice con 1, pero se te nota el pánico cuando se te acercan los pobres a pedirte una monedita y lo mejor es que te huelen el miedo).
11. Tu egocentrismo amoroso. Te cuento que los “amores en los bancos públicos” me cansaron.
12. Tus fanatismos políticos (que además, son falaces lógico y discursivamente).
13. Tu mando/a/mi/hijo/a/colegio/comprometido/con/las/organizaciones/de/derechos/humanos/y/el/medio/ambiente.
14. Tu intempestivo modo de tener razón, en especial sobre lo que no sabés. Nada.
15. Tu modo de copiar y apropiarte de mis hallazgos. Que son pocos, pero son míos.
16. Tus decisiones unilaterales y monológicas de todo: “hoy decido llamarte”, “hoy decido cogerte”, “hoy decido dejarte”, “hoy decido volver”, “hoy decido dejarte de nuevo, ya que estamos”.
17. Tu demanda y exigencia y rigurosidad y requerimiento y pretensión y capricho. Constantes.
18. Tu estilo “me hago el reo pero se me nota que soy un aristócrata venido a menos” de vestir.
19. Tu narcisismo. Creo que tu mayor deseo en la vida debe ser autochuparte para no tener que vincularte con nadie más.
20. Todos los deportes que te gustan.
21. Tus preocupaciones por los grandes temas estructurales, bélicos y trágico-greográficos.
22. Tu sentido del humor inteligente: tu “meto bocado” de les luthiers en cualquier conversación social y con mirada cómplice hacia alguien que logre pescar el chiste. Que nadie lo hace, porque el mundo sólo se acuerda de la “gallinita dijo eureka”, “la kermesse de los sábados” y el “flor de relosss”, boludo.
23. Tus juegos de palabras. Todo el tiempo. A cada momento. En cualquier contexto: te bajan la pija. Sabelo
24. Tu manera de tomar vino y de decir “beber” cada vez que lo hacés.
25. Tu insistencia en la vida natural, el campo y las vacaciones en lugares sin luz, gas, agua, fuego, viento, civilización, rueda, medicina moderna y voto femenino.
26. Tu arte de vivir (ahora te da vergüenza decirlo, pero hiciste todos y cada uno de los cursos).
27. Tu racionalidad. Perfecto y absolutamente cartesiano para cuestiones específicas (Discurso del método para el compromiso). El resto de la vida: “no pienso nada, me dejo llevar”.
28. Tu manera de imponer que el único juego permitido es el T.E.G. La play, la wii, el Mario Bros., todos para vos son juegos lobotomizantes, te llevan a lugares indeseables, a la mierda misma. Es como el nazismo, pero peor.
29. Tu modo poco divertido de jugar al T.E.G.
30. Tu estilo insoportable de adelantarte a todo lo do que dig. Como ahor. Lconchdtherma.
31. Tu libro de cabecera.
32. Tu militancia política basista y esa manera de descalificar a quienes lo hacemos por internet. Te cuento que es más cómodo, más rápido, más eficaz, más efectivo, más interpelante, más atractivo y más limpio.
33. Tu celular del siglo XVII.
34. Tu respeto hacia mi feminismo que me hace sentir avalada, admirada, apoyada, elogiada como si tuviera un año y cuatro meses.
35. Tu redundancia.
36. Tu actor preferido. Basta de la mentira del mejor “actor de teatro argentino”.
37. Tu modo de bailar así como que “no bailo” porque das interesante. No, la verdad es que das idiota.
38. Tu estilo de hablar con eufemismos. Que no es constante, pero sí recurrente.
39. Tu estilo de hablar con galleguismos: vale, coño, pequeño. Tiempo de residencia en España: un mes. Bien. Casi el mismo tiempo que García Lorca.
40. Tu salida rápida de la discusión: “es mi opinión, respetala”. No, la verdad es que ni Nietzsche era nazi, ni Platón era puto. Son anacronismos. Datos irrefutables. No son opiniones.  
41. Tu modo de convencerme de que las anteriores 40 me pueden importar muy poco.  





2 comentarios:

  1. no soporto que todo lo solucione con un paracetamol. que cuando una quiera comprar algo pregunte: es realmente necesario? que su respuesta siempre sea: mañana. que me mande a bañarme como remedio para mi dolor de cabeza, mi histeria o una indegestión. que ante el primer chichón de nuestro hijo yo quise salir corriendo a la guardia y él me contestó: no pasa nada, sacale una foto así todos se cagan de risa en facebook. y en especial, que tenga un sentido común tan claro que a veces se parece mucho a un coeficiente alto de inteligencia. #algúndíamarido.

    ResponderEliminar